La peor cita de mi vida - Parte 1

Los nombres de esta historia han sido cambiados, por obvios motivos, entre los cual está el respeto.

Por motivos que desconozco, me llegaron cientos de solicitudes en Facebook. Lo extraño es que no eran perfiles falsos, eran reales todos, con algunos amigos común algunas veces. Al principio preguntaba a esos amigos en común ¿conoces a esta persona?, la respuesta solía ser “no, me agregó y la acepté”. Sé que esta falla del algoritmo le ha sucedido a otras personas que conozco, es relativamente común. De todos esos perfiles uno de ellos era de Jocelyn. Era, porque está muerta, su perfil sigue abandonado por ahí. Sus fotos eran de baja calidad pero definitivamente reales. Le hablé y ese mismo día quedamos para salir, fue extraño lo rápido que fue. Se demoró muchísimo en llegar al lugar donde pactamos. Ese día no tenía dinero, decidí salir sin absolutamente nada más que lo necesario para regresar a mi casa. 


Llegó como una hora tarde, estaba con frío y empezando a dudar en lo que me estaba metiendo. Cuando la vi me pareció más pequeña de lo que aparentaba en sus fotos, no parecía la persona de sus fotos, durante esa hora las vi bastante, convenciéndome de que lo que estaba haciendo valía la pena. Me seguía pareciendo atractiva, caminamos por un parque cercano, me dijo que le parecía guapo, también se lo dije yo. Parecía que todo saldría bien pero no fue así, fue todo lo contrario y aún pienso bastante en eso aunque tengo la oportunidad de seguir con mi vida. Ese es el problema, yo sí tengo la oportunidad. 

En algún momento de la conversación me mencionó que estaba enamorada de un imitador de XXXTENTACION, un tipo que probablemente he visto cantar en algún concierto tributo (un muchacho delgado, blanco y con tatuajes y con cara de que nunca le ha faltado nada en la vida). Me habló mucho de él, lo suficiente para sentirme incómodo, ¿vine acá para escuchar a esta extraña hablar de un tipo que me ha hecho golpear a gente en el público? Luego me habló de su ex, un hombre de como 30 años que empezó un negocio de confecciones con ella. Ahí me dijo por dónde vivía, reconocí esa calle porque por ahí vivo, como 10 minutos a lo más caminando. Terminaron después de vivir juntos en la casa de sus padres, eso le hacía sentir que era mayor que yo, aunque no lo era.

Un tipo que se veía así

Sentarse en un parque le hacía poca gracia porque esperaba que vayamos al centro de Lima. Era un domingo, un día un poco incómodo para salir, al día siguiente tenía clases. Ella nunca asistió a una universidad, después del colegio se aventó al mundo laboral y le estaba yendo bien con el negocio que tenía. Empezó a hablar por celular y dejar de hacerme caso. Literalmente, nunca había pasado por una situación así y jamás he sido bueno para lidiar con el ridículo y el rechazo Le dije que lo dejara de hacer, no fue así, no despegaba la vista de su celular. Solo de imaginarme como mi cara se ponía cada vez más enfadada me avergüenza, felizmente no me estaba mirando, sino se habría asustado. Aunque su susto vendría después.
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